9 de julio de 1909, hace exactamente 110 años, nacía en Sevílla el genio del cante Manuel Ortega Juárez, quien brilla con luz propia en el firmamento flamenco con el nombre de Manolo Caracol.
Es imposible en pocas palabras sintetizar su trayectoria artística, su dimensión cantaora, la importancia de su legado y la relevancia de su figura. Libros, tratados, artículos y conferencias se ocupan con creces y detenimiento de ese menester.
En esta entrada, lo mejor es evocarlo en la plenitud de su arte, y para ello retomo la conocida escena final de la película "La Niña de la Venta", en que interpreta una extraordinaria zambra que acompaña al baile Lola Flores.
A boda repican las viejas campanas.
El campo se viste de flores de azahar,
que, Reyes, la niña de cara gitana
el hombre que quiere la lleva al altar.
Sendero de copla y de flores
al paso quisiera poner.
Robar al cielo sus colores.
Poner luceros en tus pies.
Bendita tu eres mujer, capullito de olor.
El alma se ríe de gozo y ventura,
que ya mi amargura por fin se acabó.